El inventario online de Multiplicadores del Desarrollo resuelve un problema crítico que enfrentan las organizaciones a la hora de evaluar el potencial de su recurso más valioso, su gente. El mismo contribuye a identificar aquellos miembros de la organización que cuentan con una excelente capacidad para el crecimiento y desarrollo profesional, aún desde las primeras instancias de su carrera profesional. Esta herramienta online evalúa cinco factores que definen la predisposición de una persona para acceder a responsabilidades más allá de su rol actual, permitiendo diferenciar entre desempeño actual y posibilidades futuras. Se centra específicamente en las cualidades y capacidades que contribuyen al desarrollo de liderazgo:
Inquietud Intelectual
La voluntad de asumir riesgos a cambio de aprender algo nuevo. Este multiplicador refleja la confianza de una persona de ir más allá de su zona de confort, así como su capacidad de escuchar y aprender de los demás.
Innovación Holística
La capacidad de incorporar múltiples enfoques y disciplinas en la evaluación y resolución de problemas. Se trata de un multiplicador que aporta alternativas novedosas que van más allá del puesto actual, accediendo a una visión amplia de la organización en su conjunto.
Conciencia Social
La capacidad para interpretar con precisión las perspectivas y experiencias de otras personas. Este multiplicador evalúa la motivación y la capacidad de una persona por comprender a los demás, en particular de aquellos que tienen diferentes puntos de vista, de escuchar con atención y respeto.
Indagación Individual
La posibilidad de juzgar las críticas y los obstáculos como oportunidades de aprendizaje y crecimiento. Todo líder reconoce que el camino hacia el liderazgo es un desafío, a veces ingrato y con dificultades en el camino. Este multiplicador capta la capacidad de una persona para mantener el equilibrio emocional y seguir aprendiendo aún en entornos adversos.
Actuación Directiva
La disposición a intervenir en equipos de trabajo proponiendo la dirección de la tarea a realizar, aun cuando no se detenta la autoridad formal de conducción, brindando sentido al trabajo, obteniendo respaldo de los demás y fomentando espíritu de equipo.